Comprometida y singular película de Alain Resnais con guión de Marguerite Duras y uno de los referentes iniciales de la nouvelle vague del cine francés de finales de los años cincuenta.
"Donde empecé a ser lo que hoy soy?, no fue un solo y definitivo golpe... el horror del olvido. Un día él vendrá me tomará por el brazo, me besará... y yo me perderé, yo lo conozco, su cuerpo se encaja al mio como un guante... ¿quien es usted? ... está destruyéndome. Yo estaba ansiosa, ansiosa de infidelidad, de adulterio, de mentiras y de muerte... nunca tuve dudas de que un día atravesaría mi camino, espere calmamente. Devóreme. Defórmeme hasta el punto de la fealdad... para que nadie después de usted nunca entienda el motivo para tanto deseo. Estaremos solos, mi amor, la noche nunca acabará. El día nunca más amanecerá para nadie, nunca más. Finalmente usted me esta destruyendo... usted es bueno para mi. Lamentaremos el día que pasó con conciencia y buena voluntad. No habrá nada más para hacernos, más allá de lamentar el día que pasó. El tiempo pasará. apenas el tiempo... el tiempo vendrá cuando no sepamos más como nombrar lo que nos une... ese nombre será apagado gradualmente de nuestra memoria hasta desaparecer completamente..."
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